domingo, 24 de febrero de 2013

Dos novatos y un temporal

Ayer mismo, "mal-coincidiendo" con un finde ventoso, Adrián y yo pusimos rumbo a Riglos con la mirada fijada en el mallo Pisón, aunque teníamos nuestras dudas de si el tiempo nos permitiría subir y nos repudiaría a la Ralla d'A Balsa. Al final, visto que el viento entraba de Norte y el día era despejado, nos decidimos a subir por "Vixente Inuxente" (260 m, 7a). Poco a poco fuimos restando metros a esta vía, que comparada con la anterior que habíamos hecho en Riglos (Zulú Demente), no tenía naaaada que ver y nos encontrábamos ante un estilo completamente distinto de escalada, sobretodo en los últimos largos donde el conglomerado se va transformando a una adherente caliza. Tanto a Adri como a mi se nos hizo bastante más dura esta ascensión, siendo que tan solo hay 30 metros de diferencia, por lo que a los últimos largos llegamos rendidos... 
Bueno, y como si de una superproducción Hollywodiense se tratase, aqui acabó la primera parte de la historia: satisfechos pero cansadísimos, conseguimos llegar a la cima del Pisón. Lo que viene a continuación, causa directa de nuestra cabezonería y "novatismo" no es tan agradable, pero son cosas que, aunque nadie desea que ocurran, te ayudan a aprender... De momento, os dejos alguna fotillo que le saqué a Adri, que con esto de ser yo el "fotógrafo oficial" no me saca ninguna a mí jeje

Adri desenredando su nueva adquisición

Vaya paredón...

Adri en la reunión del L4


 Bonito patio, incomoda reunión

Adri en el L4

Adri en el L5 

Bueno, como veis en las fotetes, disfrutamos de un día con sol pero bastante ventoso, lo que nos hizo pasar un poco de frío en las reuniones...y en la cima. Según subíamos, nuestro ritmo iba disminuyendo a causa de los metros acumulados, y además los tres últimos largos son de un estilo "panzero", cosa que acaba por destrozarte. Subimos pretando los dientes como nunca, temiendo que la noche se nos echara encima y así fue...cual fue nuestro error que nos dejamos los frontales en el coche, suerte que la luna estaba radiante y nos dejaba ver nitidamente. Bien, vista la situación (rachas de viento que te tumbaban) y dado que ninguno de los dos habíamos subido antes al Pisón, no nos quisimos arriesgar y decidimos llamar al 112. Rápidamente nos pusieron en contacto con el grupo de rescate y estos emprendieron rápidamente. Nosotros, mientras tanto, buscando formas de no perder el calor (aunque era misión casi imposible después de más de una hora...), hasta que recibimos la llamada de la Guardia Civil que nos indica donde se encuentra el primer rápel, y así poder bajar al menos hasta el collado donde nos encontraríamos. Odisea personal que tuvo Adri para bajar el primero y montar el rápel de 60 metros hasta el collado, todo mientras nos azotaba el viento huracanado que se encajaba en el collado...Finalmente, ambos bajamos al collado donde nos encontramos con Toño y Pinilla, nuestros héroes de la noche, a los que habíamos sacudido su tranquilidad para arreglar la enorme torpeza y descontrol de esta cordada. Con ellos, sabedores del camino palmo a palmo, pusimos fin a esta aventura a la 1:30 de la mañana sin problema alguno, dejando como ofrenda a Riglos de nuestra mala jugada la cuerda de Adri. 

En orden: Yo, Toño, Pinilla y Adrián 

Bien, todo quedó en un muy mal rato que pasamos por planear mal la jugada, y afortunadamente, tenemos la gran oportunidad de aprender de este enorme error que cometimos y, de esta forma, evitar una futura embarcada de tal magnitud, sabiendo darse la vuelta en el momento oportuno y planificando todo como se tiene que hacer. De nuevo, aunque no se si llegarán a leerlo, dar las gracias al servicio de emergencias y, especialmente, a Toño y Pinilla que nos bajaron de aquel huracán.

Por cierto, si por algún casual alguien que lea esto tiene pensado subir al Pisón esta próxima semana, agradeceríamos cualquier información sobre si la cuerda fija que dejamos en las anillas del primer rápel (la cuerda baja hasta el collado) sigue ahí. Y, por favor, no seáis tan cafres como estos dos.

2 comentarios:

  1. jaja, pequeña aventura y pequeño susto... todavia os queda mucho que aprender jovenes padawans.

    Un saludo. Coach F.

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  2. De los errores se aprende ;) Todos hemos tenido historias similares. Pero lo que no te mata, te hace más fuerte!

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